Experimento por casualidad, la dudosa coherencia del tiempo... la frontera es inquietante, el futuro vivo, y la intriga embrujadora.

Me siento responsable hasta el punto de asumir la absurdidad del mundo!

¿Y tu, a qué distancia del objetivo estas?...

A pocas horas antes de la lluvia, algo de importante se extravia en el aire del tiempo.

¿ Se puede rehacer la historia a fuerza de querer ?

En el mundo va la condenación eterna de Faust.

¿Dónde encontrar lo que falta a nuestras vidas?

A los encierros de la gracia, me acuerdo... paseo.

En un vagabundeo sin tregua, y cediendo de buen grado a las ofertas de la suerte, demasiado ocupados que son de alcanzar la opulencia, los espíritus lamentables, no ven la evidencia:

la inteligencia se extravia, se olvida lo importante.

Las cosas se realizan deslizando hacia abajo, arrastradas por el tiempo inexorablemente.

Desconfiemos mi Amor de las gracias angélicas, de los recuerdos confuso y de las virtudes sin manchas de este cielo tan alto...
Me acuerdo, paseo, y la luna desciende sobre este templo que fue, una serenata en los encierros de la gracia.

Alrededor de nosotros merodea el sindrome de Spinoza:

Cualquier piedra antes de caer, se persuade de que se trata de un efecto de su propia voluntad.

Delante de tus ojos, en el espesor de la furia asesina, empareja la inocencia abusada, desnudada para siempre de las características salientes de la alegria.
Bajo un sol desesperado, revelador de la ordinaria complejidad inmediata de la vida, la lógica lineal absoluta, se endereza por encima de los límites de nuestros rezos.
En la vida auténtica, un día acaba de aplastarse...
Se anunciaba tan bonita!...
Hay lugares de los cuales no se vuelve...
Hay lugares con corazon de piedra, que materializan a la amnesia.
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