"Odio viajar, es realmente una pesadilla.A fuerza de tenr que hacer a veces 3 o 4 viajes en avión en el día, y con destinaciones muy diferentes, por ejemplo, Tokio, luego un país muy frío, a continuación un país muy caliente, necesito varios grupos de maletas. Por eso me convertí en, sin elogiarme, un genio de los equipajes. Y no haré nunca suficientemente confianza a algún para dejarle preparar mis maletas, ni pensarlo.El equipaje,es una ciencia exacta entonces cuando debo ir a una de mis casas, para el trabajo o las vacaciones, yo opero de la siguiente forma: hago un marcado al suelo con pegatinas, un compartimiento por destino: Formentera, París, Cabo-Herrete, Venecia, Londres, para las casas donde voy generalmente. Luego yo llenao los compartiminetos de cosas que no se pueden duplicar (cada casa tiene el mismo mumero de almohadas, paños, productos de aseo, de papeles de plásticos de los que me sirvo para dibujar): mi comida bio, mi Champaña bio, mi agua mineral, el MP3, las impresoras, los prototipos y los expedientes en curso, etc... a continuación, lo que me sirve de maleta a ruedas, es el pequeño camión que recorre Europa para abastecer las casas.

El chofer, el mismo desde hace 25 años, pasa a recoger lo que hay en los compartimientos, da vueltas casi permanentemente por toda Europa con su cargamento actualizado de nuevo en el camión, en ese camion, también se puede encontrar una moto y a veces hasta un metro cúbico de expedientes. Entonces, entre la alimentación de las casas por camión y el hecho de que haya todo in situ, yo viajo, muy ligerito, solo con un bolso mínimo y muy flexible, en el cual llego a hacer caber un máximo de trucos: mi iPod, algunos expedientes, mi magnetofono pequeño,una pequeña cachemira.

Asi yo puedo llegar casi las manos en los bolsillos, en cada casa.

Se lo digo yo tengo horror de viajar, yo prefiero permanecer en mi casa en Londres, pero apenas puedo elegir, no tengo otro remedio que de vivir asi.

¿Cuando voy en casa de mis amigos?... pero, yo no voy nunca a casa de mis amigos... son ellos quienes vienen a mi casa."

Philippe Stark.